Tener un hijo prematuro es, sin lugar a dudas, una de las experiencias más traumáticas que puede vivir una familia. Al pequeño se le presta toda la ayuda posible desde el punto de vista médico para que salga adelante. Pero ¿qué pasa con los padres?
Pensando en las familias desde la asociación Gesfera han puesto en marcha un programa de apoyo que busca construir sinergias con empresas y colectivos sociales de la provincia de Málaga para brindar ayuda a esos padres que durante semanas tendrán a sus bebés ingresados, con lo que esto conlleva en gastos de alojamiento, manutención y desgaste psicológico.
Iniciativas de este tipo vienen a sumarse a las puestas en marcha por fundaciones como la Ronald Mc Donald con sus salas de respiro y casas en las que prestan alojamiento a familias de niños ingresados en hospitales de todo el mundo.
Esta es nuestra aportación al proyecto de Gesfera. Contamos nuestra experiencia en primera persona. Como pasamos esos 51 días de ingreso y los problemas que nos encontramos. ¡Qué bien nos habría venido contar con la ayuda de este colectivo!